@ellibelarersc

El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, reemprende su lucha contra el colectivo LGTBI, ahora con motivo de la Ley integral del reconocimiento del derecho a la identidad y expresión de género en la Comunitat Valenciana, y especialmente por su adaptación y normalización en los centros educativos. Ante esta nueva legislación el arzobispo clama en el semanario diocesano ‘Paraula’ contra la Ley afirmando que ´adoctrinar a los niños en ideología de género es una maldad´.

Según avanza el diario Levante-EMV Cañizares insta a ´actuar´ y ´no cruzarse de brazos´ ante una norma que aboca a ´la destrucción de la familia´ y vuelve a cargar contra el Consell de PSPV y Compromís. Así, advierte que ´nuestra Comunidad Valenciana que, como otras ocho comunidades autonómicas españolas, pretende imponer, a modo colonizador de las conciencias y aún por la fuerza, esta ideología mediante una legislación inicua [malvada, injusta, contraria a la equidad] que se encuentra en estos momentos en las Cortes Valencianas´.

Antonio Cañizares insta a los políticos del Consell a que ´repiensen las cosas y no vayan contra el hombre ni contra la familia. Todavía estamos a tiempo. Los considero auténticos demócratas, y no me gustaría que se convirtiesen en dictadores o tiranos´. Monseñor quiere añadir presión social pidiendo ayuda e implicación ´a padres, asociaciones que tienen que ver con la familia, a políticos, a comunicadores y periodistas, a educadores y a quienes me quieran escuchar´. ¿Y él a quién escuchará?

La conclusión del arzobispo es que ´no ayudar debidamente a la familia constituye una actitud irresponsable y suicida que conduce a la humanidad por derroteros de crisis, deterioro, destrucción y corrupción de graves e incalculables consecuencias´.

Dice monseñor que adoctrinar a los niños en esta ideología es una maldad. ¿Le recordamos las maldades en que incurren ellos, los que se creen salvadores de la humanidad? ¿No es una maldad que se adoctrine a los niños, desde su más tierna edad, en que el padre del niño Jesús es una paloma, de que su madre no tiene padre biológico, de que este niño, cuando era mayor fue crucificado, murió y resucitó a los pocos días, de que iba por los mares caminado como navega un barco, de que resucitaba a muertos y convertía el agua en vino, entre otras? ¿No es una maldad, monseñor, el abuso de niños que practican muchos de los suyos y que ustedes, malévolamente, ocultan? Adoctrinar a los niños es una maldad, ¿echarles mano, no? ¿No es una maldad la riqueza que atesoran y que no invierten en paliar el hambre del mundo?

¿Le recordamos a monseñor si entiende por colonizar conciencias lo que su iglesia impuso con el nacionalcatolicismo con el que tan a gusto se sintieron ellos y el Régimen del dictador? ¿Qué era de los hombres que por aquella época pasaban de santos e iglesias, de curas y cardenales? Ni se lo cuento. Diría que son fantasías, que ellos siempre trabajaron por el bien de las almas. Y cierto, ese bien les vino pero que muy bien.

¿Dónde está esa caridad que predicáis, Cañizares? Todo mentira. Si tuvierais caridad dejarías de una vez en paz a personas que no se meten con vosotros, que tienen otra vivencia de la sexualidad y que pueden ser tan temerosos de tu dios como, imagino, pues estoy lleno de dudas, lo puedas estar tú, Cañizares.

Muy lamentable que un personaje como este sea jefe de una iglesia como la valenciana, y que un jefe como Francisco, que hace declaraciones tan a favor del colectivo, no lo retire de la circulación. Lamentable que sus fieles le permitan y escuchen las arengas enfurecidas hacia quienes no piensan como él y no se lo reprochen. Lamentable también que le escuchen sus prédicas en contra de la igualdad de derechos entre todas las personas, en el marco de una sociedad diversa donde cada uno pueda amar a quien considere oportuno, sin ser considerado ni un peligro ni una amenaza. Lamentable también la ceguera fanática y la obsesión sexual que le están haciendo perder totalmente la razón a este monseñor.

Y termino. Señor Antonio Cañizares, hay que tener morro. Toda una vida ganándose el pan (y del bueno), el alojamiento (sin agobios de alquiler ni de hipotecas) y los viajes (en coche oficial) con el único trabajo de adoctrinar al personal… Y ahora es justo de lo que usted acusa a los demás: ´Adoctrinar a los niños en ideología de género es una maldad´, ha dicho. Quizá esta vez no lo ha pensado bien. Adoctrinar e ideología son las dos palabras en las que se basa su negocio. Por favor, un poco de coherencia. ¿O es que tiene miedo a la competencia?

En la gacetilla de mañana hablaremos de ¿LIBERTAD DE EXPRESIÓN O TERRORISMO?